¿Un café? En el ámbito laboral, muchas personas necesitan hacer un descanso y tomarse un café. Esta parada, ayuda a reducir el estrés, mejora la productividad y la sociabilidad y te recarga de energía para seguir con el resto del día.

Según un estudio de la Universidad de Copenhague, parar para beber un café durante la jornada laboral sirve a los trabajadores para liberar tensiones de manera espontánea y comentar momentos complicados con los compañeros, mejorando de esta manera las relaciones sociales entre profesionales.

Además, la cafeína que contiene esta bebida ayuda a activar la mente y por eso, trabajadores como los enfermeros, tras largas y duras jornadas de trabajo, hacen uso de él para desconectar y continuar de nuevo. Se trata por lo tanto de un miembro más del equipo sanitario, ya que con su ayuda muchos profesionales consiguen aguantar largas jornadas trabajando.

Por otra parte, este momento dedicado al café es compartido con más compañeros de hospital, centro de salud, universidad, etc., reforzando las amistades y creando un equipo sanitario más unido y efectivo. Es, sin duda, un momento en el que se puede compartir anécdotas o desahogarse con personas del mismo entorno.

Por la mañana, a medio día, después comer, para merendar… cualquier momento es bueno para un café.

“Nurse Menorca”, un grupo de investigación de enfermería de Menorca, ha realizado un vídeo en el que resume y homenajea la relación de la enfermería con el café.